El maquillaje de 2025 viene con una misión clara: potenciar la individualidad. Ya no se trata de seguir reglas estrictas, ni de copiar looks al pie de la letra. Este año, la tendencia es usar el maquillaje como una herramienta de expresión personal, jugando con texturas, acabados y colores que realcen nuestra personalidad sin perder de vista el glamour.
Piel luminosa
Las pasarelas de casas como Dior, Chanel y Pat McGrath Labs han dejado algo claro: el acabado de la piel es la clave de cualquier look. La era de las bases pesadas y los contouring extremos queda atrás para dar paso a una piel luminosa y fresca, casi como si no llevaras nada. Pero ojo, esto no significa descuidar la piel, sino todo lo contrario. El “skinimalism” sigue reinando, con bases ligeras, hidratantes con color y correctores estratégicos que permiten que la piel real brille. Los iluminadores en crema y los rubores líquidos se convierten en los mejores aliados para lograr ese efecto jugoso y natural.
Delineado gráfico
Los ojos son el lienzo perfecto para experimentar y, este año, el color juega un papel protagónico. Las sombras vibrantes, especialmente en tonos azules, verdes y naranjas, han conquistado las pasarelas, aplicadas sin reglas y con un aire casi artístico. El delineado gráfico sigue en auge, pero con formas más atrevidas y originales: dobles líneas, efectos flotantes y trazos metalizados que aportan un toque futurista al maquillaje. La inspiración viene directamente del Y2K, pero con un giro sofisticado y moderno que lo hace mucho más llevadero.
Cejas naturales
Las cejas también siguen una evolución interesante. Atrás quedaron los arcos ultradefinidos y perfectamente dibujados. Este 2025, las cejas naturales, despeinadas y con acabado laminado son la apuesta segura. La idea es que enmarquen el rostro sin robar protagonismo al resto del maquillaje.
Labios desenfadados
Si hablamos de labios, la tendencia es jugar con contrastes. Por un lado, los tonos nude siguen siendo una opción elegante y versátil, pero ahora con un toque de gloss o efecto vinilo que da volumen y frescura. Por otro, los labios oscuros vuelven con fuerza, desde burdeos intensos hasta marrones profundos con acabado mate. Y para quienes buscan un look más desenfadado, como es mi caso, los labios difuminados estilo “boca mordida” siguen siendo un must, logrando ese efecto de color desgastado y natural.
Los acabados metálicos y cromados están en todas partes, desde las sombras hasta los labios y los iluminadores. Este efecto futurista y luminoso se ha visto en pasarelas de Givenchy y Valentino, demostrando que el maquillaje puede ser una extensión del arte.
En definitiva, el maquillaje de 2025 es versátil y emocionante. No se trata de seguir tendencias al pie de la letra, sino de encontrar aquellas que mejor se adapten a tu estilo y personalidad. Ya sea que prefieras un look natural y etéreo o algo más dramático y colorido, este año hay espacio para todos los gustos.